CONVOCATORIA

Artistas en general y a alumnos, padres, personal de la escuela doce, etc...
PROYECTO 200¿Qué espacio ocupa 200, qué peso tiene 200, qué lugar ocupa 200 en el espacio?¿Qué números puedo sumar para formar 200?¿Qué palabras puedo formar con 200 letras, qué poema puedo escribir con 200 palabras, qué historia puedo contar en 200 páginas?¿A dónde puedo llegar en 200 pasos, qué hay a 200 kilómetros de donde estoy ahora, a 200 cuadras y a doscientos metros? ¿Puedo tener 200 amigos?¿Puedo escribir 200 con semillas, escarbadientes, fósforos,tarjetas de subte, manzanas, sandías, flores, cajas de leche...?¿Puedo acumular 200 juguetes, fotos, cajitas, pelotas, delantales, niños...?¿Por qué festejar 200 y no 202-2?¿Por qué 200 y no 002 en un espejo?¿Te animás a ayudarnos a aclarar alguno de estos interrogantes?Sumate a la muestra 200 en 2010 en la 12-fotografía-ilustración-intervenciones-instalaciones- -dibujo-pintura-arte correo-escultura-acumulaciones--grabado-arte digital-historieta-literatura-

martes, 7 de diciembre de 2010

jueves, 25 de noviembre de 2010

martes, 23 de noviembre de 2010

sábado, 20 de noviembre de 2010

200 GATOS EN LA DOCE- Textos originales y espectaculares!!!!!!!

Los 200 gatos locos en el bicentenario       LAS 200 NARICES FRIAS                              




Esta es la historia de cómo 2 gatitos hermanos que se habían quedado solos llegaron a tener una gran familia de 200 gatos.
Sebastián y Natalia eran gatos flacos y de ojos celestes. Ellos estaban solos, cada vez que iban a un lugar los echaban, los echaron de la florería, la peluquería, algunos edificios y hoteles. Un día Sebi y Nati fueron al “Jardín Botánico” y no los echaron.
El Jardín botánico es un lugar muy arbolado, con plantas antiguas y con personas. Ahí encontraron muchos rincones. Naty vio acercarse a un humano pero en vez de echarlos, les dio comida.
Varios días después Sebi y Naty llamaron a sus amigos que eran 208 gatos para que fueran a vivir con ellos, pero una familia de gatos era alérgica a los gatos, por eso no pudo ir, y entonces Naty, Sebi y los otros gatos formaron una gran familia de 200 gatos. Les dieron de comer mucho y fueron muy felices.
¡¡¡¡CHHHHHAAAAAUUU A TODOS!!!!!!!!!



                                                                                                                  Natalia

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VERSOS CON GATOS...
El gato Bigotes no puede comer,
una astilla en la pata le impide correr.

Había una vez 200 gatos locos,
obviamente eran de la loca de los gatos,
Un día los gatos estaban más locos que nunca
y rasguñaban y maullaban ¡MIAU, MIAU!

                                                       Ana



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                    LOS 200 GATOS LOCOS...
Una chica tenía 2 gatos locos, una vez se fue al mercado y sus 2 gatos locos quedaron solos, se escaparon y se encontraron con un señor mayor de edad que era científico. Como la gatita no podía tener gatitos el científico le dio una pócima para que pueda tener gatitos, y él pensó que con la poción iban a tener 2 o 3 gatos, pero no, la gatita tuvo 198 gatos.
Entonces la dueña tenía 200 gatos, y el problema era que los hijos de los gatitos que tenía, también eran locos como ellos, entonces algunos querían salir a la calle con correa, otros querían volar o querían hacer cosas mucho más locas y como si eso fuera poco la dueña de los 200 gatos tuvo una hija.
Los 198 gatos crecieron y tuvieron muchos gatitos y la hija de la dueña de los 200 gatos también creció y así sucesivamente.
Un día, en el cumpleaños de los gatos, ella les compró una pelota, pero los 200 gatos se peleaban todo el tiempo por la pelota, entonces la dueña, llamada Alicia, les compró una pelotita a cada gatito, o sea, 200 pelotitas pero los gatos hacían muchas travesuras y Alicia estaba muy enojada. Entonces los 200 gatitos se dieron cuenta de que estaban haciendo muchas travesuras y mientras Alicia estaba durmiendo limpiaron y ordenaron toda la casa.
Cuando Alicia se despertó vio la casa toda ordenada y limpia y se puso muy contenta, y desde ese momento los gatitos no hicieron más travesuras.
                                      Ana  y Maitena
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                               Mi gato bicentenario

Había una vez un gato abandonado en el medio de la calle y paso una señorita a la que le dio pena que ese pobre gato estuviera en la calle y decidió llevárselo a su casa para cuidarlo como si fuera su mascota por un tiempo.
El gato fue creciendo y lo mandaron a la escuela de gatos y fue aprendiendo a ser gato: maullar en la noche, comer peces, romper sillones, perseguir ratones, correr de los perros y se puso más genio pero el gato quería ser un gato bicentenario.
Él se esforzó y se esforzó hasta que lo logró y al fin cumplió sus sueños y descubrió que si se esfuerza puede lograr lo que sea.
                                                         Tobías  4ºA
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                                                       200 GATOS FRIOS
 Había una vez 200 gatos fríos que vivían en el Polo Norte y se quedaban siempre quietos, pero un día un nene le dijo a su padre si se podría llevarse un gato congelado y el padre dijo que sí.
El nene se puso feliz, y le dijo al padre:
-¿Podemos descongelarlo?
-¿Sí pero cómo lo sacamos?¿ con un martillo?- le respondió.
Así fue que lo descongelaron.
El nene estaba ansioso por tocarlo y alzarlo. Se lo mostró a la mamá y ella le dijo:
-Está muy lindo ¿cómo lo vas a llamar?
El nene contestó:
-Lo voy a llamar Bruno.
Al padre y a la madre les gustó el nombre.
Un día llevó el gato a la escuela para mostrarlo y así fue que el gato al fin se descongeló y también tuvo una familia.
                           Brisa  y Belén
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                           200 gatos con galera y peineta

En un pequeño pueblo vivía una familia de gatos. El papá gato era un gato muy trabajador y mantenía a su familia vendiendo gatitos de madera. El hijo gatito, llamado Matías, era un poquito travieso pero humilde. A la hija gatita, llamada Carolina, le gustaba jugar con sus muñecas y hacerles vestidos. La mama gata le hacia ropa a sus hijos y era muy buena cocinando sardinas. Y el ultimo integrante de la familia era el bebé llamado Lucas sólo lloraba y comía. En su pueblo todos iban al arroyo a buscar agua y pescar sardinas.
Un día, la familia gato, paseaba por el pueblo mientras iban al supermercado a buscar comida de gatos molida para el bebe y comida de gatos para ellos. Cuando salieron del supermercado vieron gatitos pobres pidiendo comida y Matías le dijo a Carolina:
– Mirá Carolina esos gatitos...pobres. Y Carolina dijo:
-Eso me dio una idea!

Llegaron a casa y los chicos se fueron a la cama y se hicieron los dormidos para poder escaparse. Cuando los papás se fueron a dormir, se escaparon y agarraron las herramientas de su padre y madera. Matías empezó a clavar y clavar y Carolina ponía cola de carpintero y cuando terminaron quedó perfecto.
-¡Está listo! dijo Matías y empezaron a poner comida de gatos y agua y hacían funcionar la máquina que fabricaron para darles de comer a los gatitos con una piedra que les dio el tío Gati que vivía en el campo.
Al otro día, vieron a todos los gatos pobres contentos de que haya comida.
Pasaron días y días y los gatos comían pero un día la piedra se encogió y la maquina dejó de funcionar parecía que esa piedra se extinguió y quedaban muy pocas piedras; entonces los dos gatos pensaron -¿y si vamos a la casa del tío Gati-.Los gatitos traviesos dejaron una nota a sus padres, empacaron y se fueron en tren al campo. Llegaron a la casa del tío Gati pero él dejó una nota en la puerta diciendo:
No estoy porque me fui de vacaciones a Hawai.
El tío Gati
Los gatitos se pusieron tristes pero ellos se acordaban de que la piedra la consiguieron en la selva que estaba atrás del campo. Caminaron y caminaron cuando se largó a llover y corrieron hasta la zona en que había hogares.
Entonces llegaron y encontraron a una anciana muy adorable que dijo:
-¡Hay que lindos gatitos! los alimentaré hasta que encuentre a sus dueños. Entonces pasaron días y los gatitos se iban ensuciando y la viejita dijo:
-Ooh! que gatitos más sucios, los tendré que bañar- y los gatitos se asustaron y salieron corriendo, se alejaron de la casa y empezaron a caminar. Vieron brillar algo y Carolina dijo:
-Mira Matías, encontré la piedra!!! y se acercaron despacio, agarraron la piedra y salieron corriendo a la parada de trenes en el campo. Cuando llegaron a su casa su hermanito y papás los estaban esperando y corriendo los chicos fueron a abrazarlos. Finalmente fueron hacia el comedero a poner la piedra y desde entonces no hubo más problemas con la máquina porque nunca se gastó.
                                                                      Araceli F 4ºA
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                            LOS 200 GATOS LOCOS


Estos gatos eran muy locos, siempre estaban de aquí para allá y eran muy lieros y se empujaban por la comida hasta que un día uno se lastimó la pata y desde entonces le molestaba y le molestaba.
El doctor dijo que tenía una fractura, entonces lo operaron.
Tiempo después le sacaron el yeso y su dueña, Laura, le hacía las curaciones en su patita. Entonces él se sintió mucho mejor porque ella le hacía masajitos todos los días.
Cuando se curó volvió a jugar, a pasear, a correr y volvió a ser muy loco.
Para que no se lastimen mas, Laura los educó a los doscientos y así aprendieron a hacer fila y a portarse bien.
                                                            Martina B 4ºA

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                   200 gatos en un edificio bicentenario.

Había una vez un edificio, que no permitía gatos hasta que un día, el dueño del edificio vio un gato lindo, y al día siguiente le dijo al encargado:
-Hola encargado. Ayer durante el día encontré un lindo gato, pobre y hambriento y aunque usted sea alérgico a los gatos… ¿se puede quedar?
-Estás loco… dijo el encargado! Nunca en mi vida! Y después apareció un gato que el encargado no vio y no estornudó.
Después apareció otro gato, que apareció con 78 gatos más. El encargado los vio y pensó que era su fin pero no estornudó para nada.
Después fue al médico y él le dijo que se olvidó de decirle que no era alérgico y desde entonces se pudo tener gatos en el edificio y hubo 200 gatos en el edificio bicentenario.
                                                                  Daniel 

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                                 200 gatos locos
En el Bicentenario 30 gatos tenían banderas de Argentina, 70 tenían camisetas de Argentina y 100 estaban pintados con los colores de Argentina.
Los 200 gatos fueron a la casa de un chico a festejar el Bicentenario haciendo locuras muy locas y los chicos reían y festejaban con los gatos.
Los 200, a la mañana, despertaron cansados y malhumorados. Al final, los gatos que se pintaron se lavaron guardaron las cosas y para festejar jugaron todo el día.
                                                                       Franco
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                                    El gato volador

Había una vez un gato con muchos sueños. Pero su mayor sueño era volar. Todos los días intentaba, intentaba e intentaba volar y sus amigos siempre se burlaban de él porque creían que era ridículo.
Al otro día apiló 4 tachos de basura, invito a todos los gatos que se burlaban de él a que lo vean e intentó volar y ¡¡¡PUMM!!! Cayó al suelo y todos los gatos se rieron en su cara ¡JAJAJAJAJJJAJAJA! y el gato se fue triste, caminando a su tiradero.
Al otro día pensó les demostraré que puedo volar. Preparó su casco y su sábana que usaba como capa. Fue al rascacielos más alto del mundo que tenía 100 pisos, vio a todos los gatos desde ahí que parecían hormigas, se puso nervioso pero cerró los ojos, respiró profundo y se tiró.
– ¡AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHH! gritaba él. ¡Pum! cayó al piso y terminó en el hospital.
Cuatro meses sin volar pero aprendió una lección DEBO HACER COSAS DE GATOS, NADA DE PÁJAROS.
Escrito por Araceli  para el gato de la seño Mariana
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                      MIS 200 GATOS ESCONDIDOS

Había una vez 200 gatos que se escondían cada vez que los miraban. Un día vino una señora, los miró y le dijo:
-Hola me llamo Silvia ¿quieren ir a mi casa?
Los 200 gatos se fueron corriendo pero Silvia no sabía que pasaba, entonces los siguió hasta llegar a una casa abandonada, entró y un gato que estaba sentado dijo:
–Hola Silvia! y ella se desmayó porque no podía creer que un gato le había hablado. Cuando se despertó, el gato dijo:
-NO TENGAS MIEDO SOLO SOY UN GATO, me llamo CAD y mis 200 amigos son retímidos.
Entonces ella le dijo:
- ¿Me puedes llamar a tus 200 amigos? Les quiero decir algo bueno. CAD silbó tan fuerte que vinieron y CAD les dijo a todos los gatos:
-Hola mis amigos les presento a Silvia. Ella es muy buena recién la conocí y es muy buena onda. Los gatos maullaron y Silvia preguntó:
-¿Por qué maúllan? y CAD le dijo:
-Es una tradición, te vamos a nombrar Reina de nuestra manada pero sólo por un tiempo.
-¿Y por qué? - preguntó ella.
- Porque en este momento estás soñando.
- ¡Qué!- Dijo Silvia- ¡CAD, ES MENTIRA!.
-Mirá parpadeá tres veces y sabrás que esto es un sueño, que no es realidad.
Silvia parpadeó y se despertó muy bien y después del sueño que tuvo SILVIA VOLVIO A VER A LOS 200 GATOS EN TODOS SUS SUEÑOS.
                                                                                  Azul P. 4ºA  
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                        Mis gatos en el bicentenario
Había una vez tres gatos que tenían dos primos que se llamaban Rally y Joya. Una vez Joya, en la escuela de gatos descubrió muchas cosas, por ejemplo la Bandera ARGENTINA , la Patria y también vio lo que es el Bicentenario. A ella le interesó mucho, mucho, pero mucho el tema.
Una vez que vio el anuncio del bicentenario, Joya fue corriendo a buscar sus 3 primos y Rally estaba ahí y Joya les preguntó:
-¿Vamos al festejo del bicentenario? hoy lo anunciaron en la TV. El primo dijo: ¡VAMOS, VAMOS!...Joya y sus primos llegaron al festejo del Bicentenario, pero Rally dijo:
- No, yo quiero jugar a saltar y maullar.
Los primos se quejaron porque ellos querían ver el desfile de los gatos Militares y Rally sólo quería jugar. Él se fue solo a comer a COME CAT y los demás fueron a los festejos. Cuando terminaron los festejos entraron los primos y la hermana, pidieron carne cruda y joya les preguntó:
-¿Qué les pareció? ellos dijeron que era interesante y muy divertido y Rally pidió disculpas por no haber estado con ellos porque se quedó solo y se aburrió.
Lucia F y Azul P. 4ºA
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                   Mis gatos en el bicentenario

Había una vez una señora que tenía un perro pero no le gustaban los perros y un día decidió que quería muchos, pero muchos, gatos.
Un día compró seis gatos y quería más. El vendedor le dijo que no le podía vender los otros gatos porque estaban encargados y ella le dijo:
-Bueno, está bien pero le dejo mi teléfono para que me avise si tiene más gatos. El señor le contestó:
-Sí señora, obvio que le aviso si tengo más gatos. Pasaron dos días y la señora se preguntó:
-¿Habrán llegado los gatos? Se fue otra vez a la veterinaria y el señor le dijo que el negocio se cerró y ella se fue sin gatos ni nada.
El día de su cumpleaños, como todos los días, salió a darles de comer a los pájaros y ese mismo día su vecina llamó a todos sus amigos. Todos fueron a su casa, pusieron en la entrada un cartel que decía: ¡Bienvenida Laura! Y le hicieron un regalo muy lindo, llamaron a su mejor amiga con la que nunca se veía.
La amiga que sabía que a Laura le encantaban los gatos le regaló los ciento noventa gatos que tenía.
Laura llegó a su casa, prendió la luz y todos dijeron:
-¡Sorpresaaaa!. Ella se puso feliz y cuando vio a su amiga, las dos se abrazaron y lloraron mucho, se pusieron a comer y después tomaron café con bizcochuelo. Cuando se fueron todos, Laura le preguntó a su amiga:
-¿Te querés quedar a vivir conmigo? Porque yo vivo sola y vos también. La amiga le respondió:
-Sería un placer vivir con vos pero en serio me dejarías…
-Sí, obvio, si sos como una hermana para mi ¡Venite, dale!
Bueno está bien pero mirá que me quedaron cuatro gatos locos.
-Bueno traelos porque a mi los gatos me encantan.
Pasaron semanas y meses y por siempre vivieron juntas y los gatos estuvieron felices porque estuvieron participando en el desfile del Bicentenario.
Giuliana F
                                                                                                                                                                 
MIS 200 GATOS

Había una vez un chico llamado Máx., y le encantaban los gatos. Entonces para su cumple sus papás le regalaron un gato y lo llamó Pulky. Un día Pulky cuando todos se fueron a dormir, se escapó por la ventana y se puso a recorrer toda la ciudad. A las 10:00 am volvió con su dueño. Máx. Se despertó y le dio la comida a Pulky y tomó su desayuno. Después de que terminaron el desayuno se pusieron a jugar hasta que se despertaron los papás. Y ahí se tuvo que ir Máx. a la escuela. Entonces Pulky quedó solo y otra vez se escapó y conoció a una gatita. Se enamoraron y a la noche salieron otra vez. Y cuando volvieron todos Pulky volvió a casa, Y cuando Máx terminó la tarea le dio a Pulky su comida. Máx comió fideos con crema.
Máx. y Pulky se pusieron a jugar y cuando ya eran las 12:00 pm todos se fueron a dormir, excepto Pulky, que se fue a ver a su novia y entonces la llevó a un restaurante y se llevaron un plato de fideos con salsa y albóndigas.
Al día siguiente, Pulky y su novia, se casaron.
Un año después, tuvieron 198 gatitos, y cuando menos lo esperaba, Max se dio cuenta de que su gato Pulky tuvo 198 gatitos. Max dijo:
-“Qué lindos gatitos”, pero se dio cuenta que no podía tenerlos a todos en su casa, entonces se dijo: “¿Qué hago ahora?”.
Entonces le contó primero a mamá y fue a mostrarle los gatitos. Y como eran tan tiernos, le dejó conservarlos.
-Pero hay que decirle a papá- dijo su mamá - pero un día que esté muy felíz para que no se asuste.
Al día siguiente, su papá escuchó desde el sótano que alguien maullaba, entonces bajó a ver qué pasaba, se encontró con 198 gatos y se enojó mucho porque no podían conservarlos.
-Imaginen cuando sean grandes- dijo su papá:- las cortinas rasguñadas, los sillones destrozados, y también va a haber que darles de comer, cuidarlos cada vez que salgamos, hay que ver que no se escapen.
-Entonces qué hacemos- dijo la mamá.
Entonces Max tuvo una idea: -¿por qué no nos mudamos hacia un lugar mucho más grande, donde haya lugar para 200 gatos.
Y los papás dijeron:
-¡ 200!
Y Max dijo:
-Sí, 200. Porque son 198 gatitos más Pulky, que es su padre, y la gatita que seguro se enamoró de él.
Entonces se mudaron a una casa mucho más grande. Llevaron todas las cosas y a los gatitos, a Pulky y a la novia. Cuando terminaron de trasladar todas las cosas, se pusieron a acomodar todos los muebles de la casa y después pintaron la casa, que parecía un chiquero. Y mientras se hizo de noche todos se fueron a dormir mientras se secaba la pintura.
Al día siguiente todos terminaron la casa y salieron a su nuevo patio, con árboles y plantas y con todos sus gatitos. Se pusieron a jugar todo el día sin parar y todos vivieron felices para siempre.
Damian F. (Cuento premiado)  
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                                                 200 gatos locos en el bicentenario
Había una vez un gato llamado Víctor que todas las noches
maullaba hasta que un día una señora le tiró un balde con agua y el vecino llamó a una perrera.
El gato que era vivo se escandió en una fábrica abandonada y el señor de la perrera que tenía sueño se dijo:
-Es muy tarde, mañana lo voy a atrapar. Y se fue a su casa a dormir.
El gato se fue a dormir a la calle y una señora lo encontró y se lo llevó a su casa y fueron felices para siempre.
Agustin G. 4ºA
                                                                                                                                                                   

                       Sergio y Felipe
Hace mucho tiempo vivía un gato que se llamaba Sergio y tenía un hijo que se llamaba Felipe. Sergio era gracioso y muy cariñoso y Felipe también.
Sergio y Felipe fueron a la casa de la dueña. Se encontraron en la casa una gata muy linda que se llamaba Lindura, era muy bonita y tenía unos ojos muy lindos de color celeste. Sergio se enamoro de ella y se lo dijo a su hijito, Felipe se sorprendió y trato de que se conocieran y lo logró.
Después de un tiempo, Lindura y Sergio tuvieron muchos hijos y todos jugaban juntos todo el día; pero un día la dueña los tuvo que abandonar porque se iba a comprar muchos perritos.
Cuando se enteraron los gatos se pusieron muy tristes y entonces se fueron a un lugar en el que les daban mucha comida pero no podían cuidarlos.
Fueron entonces a muchos lugares hasta que una nena dijo:
-¡Qué hermosos gatitos y gatitas! ¡Mamá! ¿no los podemos llevar a casa? Y su mamá dijo que sí.
Todos los gatos estaban muy contentos y los dueños los cuidaban muy bien.
Cuando la nena llegaba de la escuela les daba mucha comida y también mucho amor.
Entonces vivieron contentos y felices todos.
Natalia F. 4ºA
                                                                                                                                                                  
EL GATO RESORTE...

Hace mucho tiempo había un gato llamado Paco. Él era muy inteligente, juguetón y cariñoso.
Un día en el colegio los compañeros de él decidieron hacerle una broma y entonces le metieron un resorte en el cuerpo.
Estaba muy triste, después se fue acostumbrando y le pareció muy divertido, le decían gato resorte y era muy feliz.
Los bravucones vieron que estaba contento entonces dijeron:
-No le vamos a hacer mas bromas y le vamos a pedir perdón. Le pidieron perdón, el gatito los perdonó y por siempre fueron amigos.
Escrito por Maitena, Natalia y Ana de 4ºA, para el gato de la seño Mónica
                                                                                                              
































                          

































































martes, 12 de octubre de 2010

200 Retratos 200











lunes, 23 de agosto de 2010

Dibujar con dos veces 100 cien tapitas- 3ªA





¿Hay 200 mini dibujos o te estamos escondiendo algunos?
Contá y contestanos en comentarios....

miércoles, 4 de agosto de 2010

¿Qué se puede hacer con 200 tapitas de gaseosa?

  
Una Cara marciana que cambia de expresión

 
Un zorro con 2 colas!!!!
Una prolija escalera
                              
                                     
Media cancha de futbol
                    
                                    Una Flor de casi 1 metro cuadrado                               
 Una silueta a escala real de un alumno de 3° grado